Esta receta la he sacado de un libro de Cocina Marroquí y como tenía una bolsa con almendras en mi casa, he decidido probarla a ver que tal salía. Ha salido muy bien, la receta está muy buena, pero lo malo es que si me paso comiéndo frutos secos, me sientan mal¡¡¡¡. Pero es un bocado delicioso y con sabor muy marroquí la verdad.
Bueno os paso la receta por si os apetece probar a hacerla.
INGREDIENTES
- Medio kg. de almendras
- 2 huevos,
- 75 gr. de azúcar
- 1 pizca (pequeña) de clavo molido.
- 1/2 cucharadita de canela
- 1 sobre de levadura química.
- 1 sobre de azúcar avainillado o esencia de vainilla.
- 250 de azúcar glass.
Disponga las almendras sin pelar sobre la bandeja de horno y tuéstelas durante 5 min. Introduzca 450 gr. de almendras en el recipiente del robot de cocina y tritúrelas (guarde el resto para decorar).
Vierta el azúcar en una ensaladera. Agregue los huevos y el clavo molido. Añada la levadura química, la vainilla azucarada y la canela. Con el batidor de varillas, bata enérgicamente.
Incorpore en la mezcla las almendras tostadas y picadas. Amase con la mano hasta obtener una pasta homogénea. Con las manos, coja pequeñas porciones de pasta y forme bolitas. Aplástelas ligeramente.
Reboce una cara de cada bolita con azúcar glas. Coloque media almendra tostada en el centro de cada bocadito (yo no lo he hecho) . Deposítelos sobre una bandeja de horno untada con aceite, o sobre papel de hornear. Cuézalos 10 o 15 minutos al horno a 140ºC.
En Marruecos, estas delicias se incluyen en la categoría de pastas llamadas ghriba. En estas pastas, será suficiente añadir una minúscula pizca de clavo molido, pues su poderoso aroma, que evoca el regaliz y la violeta, podría dominar demasiado.
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